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NEOFASCISMO

Por Narciso Isa Conde

Publicado: 11/11/2024

NEOFASCISMO

<p>NEOFASCISMO<br />
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La reentrada de Trump y su vicepresidente a la Casa Blanca &ndash;custodiados por Elon Musk- abre cancha al auge de las nuevas derechas y al variado torrente neofascista continental y mundial.<br />
Previamente, el impacto degradante del capitalismo neoconservador, desbroz&oacute; caminos a las ultraderechas y a nuevas modalidades del fascismo, conocidas como neofascismos.&nbsp;<br />
El fen&oacute;meno no es nuevo, pero si diferente, sobre todo en su fase actual. En su matriz est&aacute; el ultraderechismo hist&oacute;rico, que incluye el fascismo que simbolizaron Hitler, Mussolini, Franco y otros tiranos europeos, seguidos de oprobiosas dictaduras militares latino-caribe&ntilde;as. Nueva es su readecuaci&oacute;n.<br />
Las fuentes y expresiones m&aacute;s comunes y tradicionales del neofascismo son el despotismo (negaci&oacute;n progresiva de la democracia liberal), el racismo derivado de supremac&iacute;a blanca colonialista, la xenofobia, el machismo y la homofobia, potenciadas con sus discursos cargados odios.<br />
En los nuevos fascismos (Trump, Bolsonaro, Noboa, Milei, Bukele, Uribe&hellip;) esas fuentes se entremezclan con la privatizaci&oacute;n o apropiaci&oacute;n privada del patrimonio colectivo de las sociedades, incluido el patrimonio natural.<br />
Tambi&eacute;n abrazan las falacias del libre mercado, de la libertad de precio y la competitividad sin l&iacute;mites; precisamente en esta &eacute;poca de predominio y control de los mercados por los grandes monopolios y oligopolios capitalistas, transnacionales y locales.<br />
El neofascismo incorpora para s&iacute; el individualismo extremo y la insolidaridad de la era neoliberal, el consumismo desbocado y la mercadolog&iacute;a que explota emociones personales, aplasta el razonamiento cr&iacute;tico e impone la era de las mentiras y medias verdades.<br />
&nbsp;En esa misma coordenada, contrapone el individuo al estado, desplaza ideol&oacute;gicamente la contradicci&oacute;n capital trabajo y encubre la injusta relaci&oacute;n causal mega capitalistas vs pueblo empobrecido.<br />
Remodela en mayor grado el Estado, despoj&aacute;ndolo a&uacute;n m&aacute;s de la propiedad empresarial, de la gesti&oacute;n econ&oacute;mica y de su rol social.<br />
Endiosa con m&aacute;s intensidad el mercado, procura anular o restringir al m&aacute;ximo las conquistas y beneficios sociales, pol&iacute;ticos, econ&oacute;micos y culturales del pueblo trabajador.<br />
A la vez, agiganta el estado en lo militar, en sus mecanismos de protecci&oacute;n del gran capital privado, local y transnacional y en sus asociaciones e instrumentos de cogesti&oacute;n con el empresariado privado y financiamientos para la expansi&oacute;n del capital, maximizando sus ganancias y el rol de medios enajenantes.<br />
Aplasta toda expresi&oacute;n de soberan&iacute;a real frente a la dominaci&oacute;n imperialista y a la vez reformula un seudo- nacionalismo que se nutre del racismo, la xenofobia, la ignorancia y la alienaci&oacute;n ideol&oacute;gica.<br />
El c&oacute;ctel de ingredientes es m&aacute;s amplio, pero por hoy lo dejo ah&iacute; para observar c&oacute;mo se lo toman Abinader, Leonel y comparsa.</p>

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