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Aumenta la indigencia entre las dominicanas, según la Cepal

Ya se sabía que la pobreza, en todo el mundo, tiene rostro de mujer. Pero el anuario estadístico de la CEPAL recién publicado, plantea un ensanchamiento importante en República Dominicana de la indigencia en las mujeres, en una proporción mucho mayor que el resto de la región.

Publicado: 10/02/2015

Aumenta la indigencia entre las dominicanas, según la Cepal

<p>SANTO DOMINGO.- Ya se sab&iacute;a que la pobreza, en todo el mundo, tiene rostro de mujer. Pero el anuario estad&iacute;stico de la CEPAL reci&eacute;n publicado, plantea un ensanchamiento importante en Rep&uacute;blica Dominicana de la indigencia en las mujeres, en una proporci&oacute;n mucho mayor que el resto de la regi&oacute;n.</p>

<p>El &Iacute;ndice de Feminidad de la Indigencia y de la Pobreza, que indica qu&eacute; cantidad de hogares encabezados por mujeres est&aacute; debajo de la l&iacute;nea de pobreza por cada 100 hogares encabezados por hombres en esa situaci&oacute;n, mostr&oacute; que de 129.4 en el a&ntilde;o 2002, el &iacute;ndice de indigencia entre mujeres pas&oacute; a 152.2 en 2013, situaci&oacute;n que se hace a&uacute;n m&aacute;s cr&iacute;tica en las zonas rurales, donde el &iacute;ndice m&aacute;s reciente es de 167.8.</p>

<p>Esto no significa que hay m&aacute;s hogares pobres en el pa&iacute;s, pero s&iacute; que m&aacute;s mujeres se sumen en la indigencia cada a&ntilde;o.</p>

<p><strong>&iquest;Por qu&eacute; ellas encabezan las poblaciones viviendo en extrema pobreza y pobreza?</strong><br />
&ldquo;Hay un v&iacute;nculo muy fuerte entre participaci&oacute;n laboral de las mujeres y pobreza. En la medida en que est&aacute;n posibilitadas de entrar al mercado laboral y generar ingresos las aleja de la pobreza&rdquo;, explica la economista y experta en g&eacute;nero Consuelo Cruz. &ldquo;&iquest;Qu&eacute; ha pasado desde 2002 en materia: hay cada vez m&aacute;s mujeres que demandan entrar al mercado laboral pero la econom&iacute;a no ofrece los suficientes empleos para que puedan laborar&rdquo;.</p>

<p>Los datos de desempleo planteados por la CEPAL hacen palpable la escasez de oportunidades entre las dominicanas para conseguir trabajo. A pesar de que las tasas de desempleo son considerablemente menores a las del 2000, a&ntilde;o en que se inici&oacute; la comparaci&oacute;n, la brecha sigue siendo amplia: mientras en 2013 la tasa de desempleo en hombres era de 5, en las mujeres sub&iacute;a a 10.4</p>

<p>Estos niveles de pobreza tienen un impacto social alto, reflexiona la economista Cruz, pues cerca del 40% de los hogares monoparentales son liderados por una mujer, pero alrededor del 60% de los m&aacute;s pobres, y por ende m&aacute;s vulnerables, tiene a una mujer a la cabeza.</p>

<p>La disparidad resulta a&uacute;n m&aacute;s dram&aacute;tica entre las dominicanas j&oacute;venes. En edades entre 15 y 24 la tasa de participaci&oacute;n en el mercado laboral de ellas es la mitad que la de sus coetaneos varones, 27.8 frente a 52. En el siguiente grupo, de 25 a 34 a&ntilde;os, ellos participan en una tasa de 92 mientras ellas alcanzan 61.2.</p>

<p>&ldquo;No solo son las posibilidad de insertarse, sino las condiciones: ganan menos aun siendo m&aacute;s capacitadas&rdquo;, explica Cruz.</p>

<p>En comparaci&oacute;n con otros pa&iacute;ses de Am&eacute;rica Latina, la feminizaci&oacute;n de la pobreza ha sido m&aacute;s dram&aacute;tica, seg&uacute;n demuestras las estad&iacute;sticas del anuario de la Comisi&oacute;n Econ&oacute;mica para Am&eacute;rica Latina y el Caribe (CEPAL).</p>

<p>Pa&iacute;ses como El Salvador han logrado mantener y hasta disminuir la proporci&oacute;n de hogares pobres encabezados por mujeres, al igual que Guatemala, Honduras, Nicaragua y Per&uacute;. Casos como Chile, Ecuador, Panam&aacute;, Venezuela y Rep&uacute;blica Dominicana han verificado una profundizaci&oacute;n de la indigencia en mujeres.</p>

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