El grupo terrorista Estado Islámico (EI) puede haber cometido en Irak los tres delitos internacionales más graves: genocidio, crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra, según un informe del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Publicado: 19/03/2015
<p>El grupo terrorista <strong>Estado Islámico</strong> (EI) puede haber cometido en Irak los tres delitos internacionales más graves: <strong>genocidio, crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra</strong>, según un informe del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos.</p>
<p>“El esquema manifiesto de ataques contra la minoría yazidí indica la intención del EI de destruir”, a estas personas como grupo étnico, lo que sugiere claramente que “<strong>podría haber cometido un genocidio</strong>“, resalta el informe, publicado este jueves.</p>
<p>El documento fue solicitado el pasado mes de septiembre por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU al Alto Comisionado tras una sesión especial de este organismo dedicada a la crisis en Irak.</p>
<p>El Alto Comisionado envió al país una misión especial de investigación a finales del año pasado que se dedicó a <strong>entrevistar a más de un centenar de personas que fueron testigos y sobrevivieron</strong> los ataques del EI desde junio del 2014 a febrero del 2015.</p>
<h2>Brutales abusos de mujeres y niños</h2>
<p>La comunidad yazidí es una minoría religiosa afincada en el Kurdistán -territorio repartido entre los Estados de Turquía, Irak, Siria e Irán-, seguidora de una antigua religión monoteísta preislámica.</p>
<p>El informe documenta la <a href="http://www.rtve.es/alacarta/videos/telediario/yihadistas-asesinan-80-hombres-minoria-yazidi-norte-irak/2713408/">muerte brutal de centenares de hombres y chicos yazidíes</a> en el valle del Nínive en agosto pasado, que fueron <strong>asesinados a sangre fría</strong> tras ser separados de las mujeres y los niños, por negarse a convertirse al islam, según los testimonios de testigos y periodistas.</p>
<p>Las <strong>mujeres </strong>fueron <strong>secuestradas como “botín de guerra” y vendidas como esclavas sexuales</strong>. Con minuciosidad, el informe cuenta cómo niñas yazidíes de entre seis y nueve años fueron violadas repetidamente por los militantes yihadistas, y cómo estos combatientes intentaron provocar abortos en mujeres embarazadas al maltratarlas y violarlas repetidamente.</p>
<p>A los niños menores de 15 años se les reclutó, se les obligó a convertirse al Islam, se les inculcó la cosmovisión yihadista, y se les entrenó militarmente, haciéndoles ver, entre otras, decapitaciones repetidamente.</p>
<h2>Abusos contra otras minorías</h2>
<p>Por otra parte, el texto documenta que además de centrarse en la minoría yazidí, <strong>el Estado Islámico ha cometido abusos generalizados</strong>, entre ellos asesinatos, torturas, violaciones, esclavitud sexual, conversiones forzadas y reclutamiento de niños, que <strong>podrían constituir crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra</strong>.</p>