Turno Libre

Cuando la educación estaba en las nieblas de un naufragio

Contenido patrocinado El gobierno haitiano pretendió imponer el uso del francés en el Santo Domingo español

Publicado: 15/02/2018

Cuando la educación estaba en las nieblas de un naufragio

<p>SANTO DOMINGO. La dominaci&oacute;n haitiana fue un per&iacute;odo est&eacute;ril para la educaci&oacute;n, situaci&oacute;n que caus&oacute; desasosiego en la sociedad de la &eacute;poca, en vista de que se rompi&oacute; una tradici&oacute;n que exist&iacute;a en materia de ense&ntilde;anza que empez&oacute; poco despu&eacute;s del 1502, cuando los primeros maestros, frailes de la Orden de San Francisco, iniciaron la docencia en su convento de Santo Domingo.</p>

<p>En la colonia espa&ntilde;ola, hab&iacute;a sido creado primero el Real Colegio Francisco Javier y luego la Universidad Santiago de la Paz y Gorj&oacute;n. Posteriormente fue fundada por bula papal, el 28 de octubre de 1538, la Universidad de Santo Tom&aacute;s de Aquino, a la que concurr&iacute;an incluso estudiantes de otros pa&iacute;ses. De esta &uacute;ltima academia se origin&oacute; posteriormente la Universidad de Santo Domingo.</p>

<p>De modo que cuando Boyer se impuso con su fuerza militar en la parte Este hab&iacute;a universidad en Santo Domingo. Pero el 3 de diciembre de 1823, el mandatario dirigi&oacute; una circular a los comandantes de los departamentos, en la que dispuso el ingreso al cuerpo militar de los j&oacute;venes de 16 a 25 a&ntilde;os. Entonces los alumnos de la universidad pasaron a los cuarteles y la academia fue cerrada.<img src="https://estatico1.diariolibre.com/binrepository/693x463/0c47/693d370/none/10904/SUIQ/image_content_9533410_20180213095427.jpg" /></p>

<p>La decisi&oacute;n de Boyer caus&oacute; el cese de la casa de estudios, situaci&oacute;n que &eacute;l no intent&oacute; revertir en los a&ntilde;os siguientes.</p>

<h2>&ldquo;... (la ense&ntilde;anza), que buscaba &ldquo;contrarrestar los efectos de la pol&iacute;tica ling&uuml;&iacute;stica haitiana en el &aacute;mbito educativo, por un buen n&uacute;mero de profesores privados dominicanos que, al impartir deliberadamente sus clases en lengua espa&ntilde;ola, asegur&oacute;, durante el per&iacute;odo de la anexi&oacute;n al pa&iacute;s vecino, la continuidad de la tradici&oacute;n hisp&aacute;nica...&rdquo;, Germ&aacute;n de Granda.</h2>

<p>El historiador Emilio Rodr&iacute;guez Demorizi escribi&oacute; que tras la ocupaci&oacute;n militar, el gobernante manifest&oacute; su inter&eacute;s de reunirse en claustro con profesores y estudiantes de las diversas facultades y que en dicho encuentro expres&oacute; que ten&iacute;a &ldquo;sumo inter&eacute;s en conservar ese n&uacute;cleo de saber humano&rdquo; y que incluso prometi&oacute; enviar j&oacute;venes haitianos para que establecieran lazos de perpetua uni&oacute;n.</p>

<p>&ldquo;Pero no bien dio la espalda a la ciudad absorta, cuando el general Borgell&aacute; mand&oacute; cumplir las inflexibles &oacute;rdenes del presidente... Era una luz apagada violentamente entre las nieblas de un naufragio&rdquo;, agreg&oacute;.</p>

<p>Al respecto el autor Ricardo Pattee arguye que el contraste era enorme entre el desierto cultural que fue la parte francesa y el florecimiento de una cultura religiosa y profana en la franja espa&ntilde;ola. Recuerda que Espa&ntilde;a fund&oacute; colegios y universidad en su primera posesi&oacute;n en ultramar, mientras que Francia no lo hizo en Saint Domingue.</p>

<p>El ensayista resalta una diferencia esencial entre el sistema de gobierno espa&ntilde;ol, que tend&iacute;a a crear una conciencia y una personalidad en su colonia y el de Francia, que explotaba su posesi&oacute;n en ultramar en nombre de la prosperidad de la metr&oacute;poli.</p>

<p>Sin embargo, muchos mulatos de Saint Domingue se educaron en Francia, pero casi siempre despu&eacute;s de culminar sus estudios optaban por permanecer en el exterior.</p>

<p>Entre 1822 y 1843, la educaci&oacute;n estuvo relegada en Hait&iacute;. Por eso, no ha de extra&ntilde;arse que Boyer mantuviese la misma pol&iacute;tica en el lado Este. Tras la revoluci&oacute;n de 1843, que lo depuso, fue nombrado el primer ministro de instrucci&oacute;n p&uacute;blica y se fundaron las primeras escuelas en la parte occidental.<img src="https://estatico1.diariolibre.com/binrepository/601x766/0c69/600d369/none/10904/LTWL/image_content_9533501_20180213101332.jpg" /></p>

<p><img alt="Cuando la educación estaba en las nieblas de un naufragio" src="data:image/svg+xml;charset=utf-8,%3Csvg%20xmlns%3D'http%3A%2F%2Fwww.w3.org%2F2000%2Fsvg'%20viewBox%3D'0%200%20600%20369'%2F%3E" style="height:369px; width:600px" /></p>

<p>El testimonio de Serra</p>

<p>El trinitario Jos&eacute; Mar&iacute;a Serra dio testimonio sobre el impacto que caus&oacute; el cese de la docencia en Santo Domingo.</p>

<p>&ldquo;Cerrada la universidad con el dominio de los haitianos, el esp&iacute;ritu filantr&oacute;pico del Dr. D. Juan Vicente Moscoso (pasado rector de la academia) sufr&iacute;a al contemplar la juventud dominicana sin m&aacute;s alimento intelectual que el escas&iacute;simo que le proporcionaban las escuelas de particulares, limitadas a ense&ntilde;ar a leer y escribir (formar bonita letra) y a repartir rutinariamente las primeras reglas del arte de contar. En la escuela p&uacute;blica se ense&ntilde;aba lo mismo, pero en franc&eacute;s, que era el idioma oficial. El Dr. Moscoso abri&oacute;, pues, una clase en su casa, y all&iacute; concurrieron unos tantos j&oacute;venes &aacute;vidos de instrucci&oacute;n&rdquo;, escribi&oacute; el patriota.</p>

<p>Los grupos de mayor conciencia social e intelectual no cruzaron los brazos ante el cierre de los planteles y mantuvieron abiertas varias aulas en casas particulares y en otros espacios donde impart&iacute;an docencia y discretamente se discut&iacute;an ideas.</p>

<p>Por un per&iacute;odo el sacerdote D. Jos&eacute; Ma. Sigar&aacute;n abri&oacute; en el convento Santa Clara un curso de lat&iacute;n. Otro docente voluntario fue el doctor Manuel Mar&iacute;a Valverde, quien dedicaba el poco tiempo que les dejaban sus atenciones a los enfermos a la educaci&oacute;n de sus hijos y sumaba algunos alumnos que quisieran recibir ese beneficio, como fueron los Duarte y otros.</p>

<p>Tras su llegada a la parte Este, en 1838, el sacerdote Gaspar Hern&aacute;ndez se convirti&oacute; en el mentor de los revolucionarios congregados en la sociedad secreta La Trinitaria.</p>

<p>Hern&aacute;ndez impart&iacute;a sus clases durante cuatro horas en la ma&ntilde;ana, con &ldquo;marcado placer&rdquo;, en la sacrist&iacute;a del convento Regina Angelorum, donde se debat&iacute;an tambi&eacute;n ideas pol&iacute;ticas y se hablaba sobre la situaci&oacute;n pol&iacute;tica imperante, en un ambiente de intimidad, seg&uacute;n cont&oacute; Serra.</p>

<p>Defensa de la tradici&oacute;n</p>

<p>El fil&oacute;logo Germ&aacute;n de Granda valor&oacute; esa &ldquo;transcendental tarea cumplida&rdquo; (la ense&ntilde;anza), que buscaba &ldquo;contrarrestar los efectos de la pol&iacute;tica ling&uuml;&iacute;stica haitiana en el &aacute;mbito educativo, por un buen n&uacute;mero de profesores privados dominicanos que, al impartir deliberadamente sus clases en lengua espa&ntilde;ola, asegur&oacute;, durante el per&iacute;odo de la anexi&oacute;n al pa&iacute;s vecino, la continuidad de la tradici&oacute;n hisp&aacute;nica...&rdquo;.</p>

<p>En el convento tambi&eacute;n ense&ntilde;aban lat&iacute;n, teolog&iacute;a y otras materias. Se racionalizaba la historia universal compar&aacute;ndola con el estado del pa&iacute;s: el contraste repugnante que presentaba la fuerza romana y la inteligencia de Grecia con la abyecci&oacute;n de la antigua Espa&ntilde;ola, bosquejado h&aacute;bilmente por aquel profesor (Hern&aacute;ndez) liberal y patriota, despertaba en los alumnos el sentimiento de su abatimiento revel&aacute;ndoles el secreto de una fuerza latente que antes no hab&iacute;an podido descubrir, agreg&oacute; F&eacute;lix Mar&iacute;a del Monte.</p>

<p>El historiador se&ntilde;al&oacute; que se hablaba libremente en el retiro de los claustros del convento Regina Angelorum sobre los derechos imprescriptibles del hombre, el origen del poder en las sociedades, las formas de gobierno, la &iacute;ndole de las constituciones, el sufragio de los pueblos, el principio leg&iacute;timo de la autoridad y la soberan&iacute;a de la raz&oacute;n.<img src="https://estatico3.diariolibre.com/binrepository/600x401/0c16/600d369/none/10904/IUOO/image_content_9533400_20180213104443.jpg" /></p>

<p>&nbsp;</p>

<p>En sus &ldquo;Apuntes&rdquo;, Rosa Duarte, hermana del pr&oacute;cer Juan Pablo Duarte, asegur&oacute; que la clase de filosof&iacute;a que impart&iacute;a el sacerdote Hern&aacute;ndez era m&aacute;s una junta revolucionaria que una sesi&oacute;n de estudios filos&oacute;ficos.</p>

<p>Lo cierto es que Hern&aacute;ndez, de profundos sentimientos hispanos, se vincul&oacute; con j&oacute;venes distinguidos como los Duarte, Billini, Bobea, Mella, Llaver&iacute;a, S&aacute;nchez, Barriento y otros pertenecientes al bando antihaitiano, sobre los que ejerci&oacute; influencia.</p>

<p>Los cr&iacute;ticos del religioso han argumentado que Hern&aacute;ndez era un pertinaz enemigo de los haitianos y que trabajaba para que la parte Este retornara al dominio de Espa&ntilde;a, pa&iacute;s por el que sent&iacute;a un patriotismo profundo.</p>

<p>La fracasada imposici&oacute;n del franc&eacute;s</p>

<p><img alt="La fracasada imposición del francés" src="data:image/svg+xml;charset=utf-8,%3Csvg%20xmlns%3D'http%3A%2F%2Fwww.w3.org%2F2000%2Fsvg'%20viewBox%3D'0%200%20185%20134'%2F%3E" style="height:134px; width:185px" /></p>

<p>De acuerdo a Rodr&iacute;guez Demorizi dos d&iacute;as despu&eacute;s de ocupar el territorio espa&ntilde;ol, el 11 de febrero de 1822, Boyer envi&oacute; una instrucci&oacute;n a los comandantes militares de la parte Este en el que expresaba &ldquo;...el inter&eacute;s de la Rep&uacute;blica&rdquo; en que la parte oriental cambiara a la brevedad posible &ldquo;de h&aacute;bitos y costumbres&rdquo; ... &ldquo;a fin de que la uni&oacute;n sea perfecta y las antiguas diferencias desaparezcan sin m&aacute;s&rdquo;.</p>

<p>El gobierno haitiano decidi&oacute; imponer el uso del franc&eacute;s en los documentos oficiales del Estado y con ese prop&oacute;sito emiti&oacute; la primera orden, cuando hab&iacute;a un ambiente de aparente tranquilidad y resignaci&oacute;n de parte de un conglomerado que inicialmente no opuso resistencia a la dominaci&oacute;n.</p>

<p>No obstante, apenas funcionaba una escuela que ense&ntilde;aba franc&eacute;s, lo que explica en parte que las autoridades no fueran capaces de poner en pr&aacute;ctica medidas eficaces que patrocinaran el aprendizaje de este idioma ni su promoci&oacute;n mediante una pol&iacute;tica cultural que incentivara la lectura y la creaci&oacute;n en este c&oacute;digo ling&uuml;&iacute;stico en los escasos miembros de las &eacute;lites intelectuales que se quedaron viviendo en Santo Domingo.</p>

<p>Aunque la<em>&nbsp;Comission d&rsquo; Instruction Publique&nbsp;</em>de Hait&iacute; recomend&oacute; al gobierno que enviara al Este varios maestros para que ense&ntilde;aran franc&eacute;s en las escuelas, solo funcion&oacute; un plantel que ense&ntilde;aba el idioma extranjero en Santo Domingo. De 1822 al 1837, fungieron como sus directores el haitiano Napole&oacute;n Guy Chevremont d Albigny y el dominicano Manuel Mar&iacute;a Valencia.</p>

<p>A&ntilde;os despu&eacute;s, en 1843, Boyer elabor&oacute; un proyecto destinado a ampliar la limitada estructura educativa, que consistir&iacute;a en la instalaci&oacute;n de un liceo secundario y de seis escuelas primarias en la zona occidental y de una en la oriental. No obstante, esos prop&oacute;sitos fueron arruinados por el caos provocado por el terremoto del 7 de mayo del a&ntilde;o anterior.</p>

<p><img src="https://estatico3.diariolibre.com/binrepository/185x139/0c3/185d134/none/10904/IUKP/image_content_9533406_20180213100331.jpg" style="float:left; opacity:0.9" /></p>

<div>&nbsp;
<div>
<p>Tampoco prosper&oacute; el proyecto presentado en 1843 a la Asamblea Nacional por el diputado de Puerto Plata, Federico Peralta Rodr&iacute;guez, quien propon&iacute;a la creaci&oacute;n de varias escuelas en Santo Domingo y la reapertura de la universidad.</p>

<p>Aunque los intentos oficiales por abrir m&aacute;s centros educativos fracasaron, s&iacute; funcionaron en Santo Domingo algunos planteles privados dedicados a la ense&ntilde;anza del franc&eacute;s, como fueron los dirigidos por Mr. Bruat, con quien estudi&oacute; Juan Pablo Duarte, y madame Martel.</p>

<p>En 1838 y 1841, en Puerto Plata y en Saman&aacute; educadores metodistas, llevados por el gobierno haitiano, fundaron escuelas que se empleaban en la ense&ntilde;anza de las lenguas inglesa y francesa.</p>

<p>La realidad mostr&oacute; que las pretensiones de Boyer, de imponer el franc&eacute;s en la administraci&oacute;n p&uacute;blica, eran imposibles. La medida, que provoc&oacute; el disgusto de los dominicanos, no pudo ser aplicada de manera estricta salvo en la esfera militar.</p>

<p>Para saber m&aacute;s...</p>

<p>&ldquo;Un caso de planeamiento ling&uuml;&iacute;stico frustrado en el Caribe hisp&aacute;nico: Santo Domingo, 1822- 1844&rdquo;. German de Granda.</p>

<p>&ldquo;Panorama hist&oacute;rico de la literatura dominicana&rdquo;. Max Henr&iacute;quez Ure&ntilde;a.</p>

<p>&ldquo;La cultura y las letras coloniales en Santo Domingo. Pedro Henr&iacute;quez Ure&ntilde;a&rdquo;.</p>

<p>&ldquo;Los d&iacute;as alcionios&rdquo;. Manuel N&uacute;&ntilde;ez.</p>

<p>&ldquo;La Rep&uacute;blica de Hait&iacute; y la Rep&uacute;blica Dominicana. Diversos aspectos de un problema hist&oacute;rico&rdquo;. Jean Price-Mars.</p>

<p>&ldquo;Invasiones haitianas de 1801, 1805 y 1822&rdquo;. Emilio Rodr&iacute;guez Demorizi.</p>

<p>&ldquo;La dominaci&oacute;n haitiana&rdquo;. Frank Moya Pons.</p>

<p>&ldquo;Hait&iacute; pueblo afroantillano&rdquo;. Ricardo Patte.</p>
</div>
</div>

← Volver al inicio